Introducción

El fin educativo del videojuego es la mejora de la producción y la percepción de la prosodia con efectos comunicativos.

El videojuego educativo Pradia permite una inmersión del jugador, lo que favorece que la persona con necesidades específicas de apoyo educativo interiorice los contenidos de aprendizaje y los traslade a su vida diaria.

Aprendizaje de habilidades comunicativas

Un videojuego educativo para el aprendizaje de habilidades comunicativas en la educación especial. Con PRADIA los niños aprenden a identificar y producir mejor patrones entonativos y emocionales básicos, además de ensayar habilidades sociales y cotidianas.

Una interfaz sencilla y clara

La interfaz de PRADIA está pensada para que sea muy fácil de entender. Iconos grandes, letras claras y funcionalidades básicas para no complicar el proceso de primera toma de contacto con el juego. La curva de aprendizaje de uso de PRADIA es muy asequible. Además, todas las indicaciones, instrucciones, mensajes, etc. siguen la misma filosofía: priorizar la funcionalidad y la facilidad de uso frente a la estética o el diseño.

Diferentes tipos de actividades

PRADIA combina diferentes tipos de actividades para el trabajo de las habilidades comunicativas, junto con un gran conjunto de otras competencias y habilidades. Para ello se han promovido diferentes tipos de estructuras para las dinámicas así como contenidos variados que potencien, en la medida de lo posible, la diversión del jugador en el proceso de uso del videojuego educativo.

Puzzles, laberintos y mini Juegos

Además, hemos añadido mini juegos (puzzles, laberintos y otras modalidades) para amenizar el aprendizaje y trabajar otras competencias. La gran mayoría de tipologías de juego permiten el desarrollo de competencias y habilidades genéricas que sirven de refuerzo del proceso educativo y ayudan a mantener el interés y la atención.

Una combinación de realidades

PRADIA combina diferentes tipos de escenarios y de narrativas: desde el núcleo fantástico de la historia, a la vivencia de experiencias rutinarias, como la compra de productos en una tienda o el uso del transporte público.

Todo ello en un entorno formado por diferentes tipos de actividades educativas y de ocio para potenciar el aprendizaje de los jugadores en un marco lo más immersivo posible.